Políticamente corrector (de estilete)

miércoles, 12 de agosto de 2009

Necro-lógica

«Cómo hacerse el sueco sin serlo»

El sueco Stieg Larsson nunca vió publicada ninguna de las tres novelas que escribió antes de morir en 2004, a los 50 años. Él no tuvo ni siquiera la satisfacción de ver impresa la primera novela de su trilogía «Millenium». 

La arquitecta sueca Eva Grabrielsson, pareja de Larsson durante 32 años, no verá ni un solo céntimo de los varios millones de euros de ganancia que hasta hoy han producido las ventas de sus tres libros. ¿Será por eso que Suecia es el paradigma del «Estado del Bienestar»? 

Mientras tanto son muchos los intermediarios que están haciéndose millonarios haciéndose los suecos a costa del sueco, que murió sin pena ni gloria. Una vez fallecido, el mundo empezó a rendirse a sus pies diciendo que era el Dashiell Hammett del siglo XXI. Su mujer lee azorada «Stieg Larsson» en todos los periódicos, pero la Ley le prohíbe recibir una sola moneda del fenómeno

Pobre tipo. Si viviese para verlo, se horrorizaría del esperpéntico espectáculo que se ha montado para aprovechar el tirón, la moda Larssoniana que todavía durará varios millones de ejemplares más. Es la necro-lógica, una lógica irreversible. Sí, Stieg. Es para morirse.

No hay comentarios:

Publicar un comentario